Y es que debe ser la única violación de la historia en que la «violada» le pide al «violador» que se la meta «pal fondo».
Y eso consta en el sumario textualmente, ya que aparece nítidamente en uno de los vídeos.
Pero si la gente se leyese el sumario antes de publicar «¡violación!» en las redes sociales y alegrarse porque cinco niñatos, bastante puercos, pero inocentes, se pudrirán en la cárcel, seguramente no nos gobernarían los mierdas que nos gobiernan.