La empresa dedicada a los papeles de seguridad y alta tecnología de impresión para la impresión de 150 monedas nacionales en el todo el mundo, De La Rue, ha perdido 18 millones de dólares después de que el Banco Central de Venezuela no haya pagado sus cuentas.
Y es que si bien hasta ahora el país venezolano -que se encuentra en un proceso hiperinflacionario- se había caracterizado por ser un cliente «muy bueno», como informa el Financial Times, la depreciación del bolívar ha llegado a tal punto que el papel en el que se imprime el dinero vale más que el propio bolívar.