El mensaje ha sido escrito, en sus propias palabras, con el único objetivo de demostrar que las mujeres en situaciones de poder pueden llegar a ser tan «crueles y perversas» como los hombres. En él relata que tras el primer día de rodaje, ella le invitó a un club de Striptease —propuesta que él rechazó—; y que durante una fiesta Perry le bajó los pantalones delante de la gente para que todo el mundo pudiera verle el pene.