Arran, las juventudes separatistas vinculadas a la CUP, han dejado su firma en una de las paredes de la iglesia del Santo Cristo Rey del barrio de la Sagrera de Barcelona, la pintada «gora ETA» acompañada de una estelada, un símbolo feminista, la hoz y el martillo y la serpiente con el hacha, el emblema de la banda terrorista.