Zakaria Al-Jaber, de seis años, fue decapitado con un trozo de cristal mientras su madre trató desesperadamente de salvarlo en Arabia Saudita.
Según informan medios locales, el niño estaba en un taxi con su madre de camino al santuario del Profeta Muhammad en Medina cuando el conductor detuvo el auto y obligó al niño a salir.
Lo arrastró a un área cerca de una cafetería en el vecindario de Al-Tilal, antes de romper una botella de vidrio, según informaciones de TMV. El taxista le cortó la garganta con un trozo de vidrio antes de apuñalarlo repetidamente mientras su madre y un oficial de policía intentaron detener el brutal ataque.